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“El buen periodismo vale dinero y requiere tiempo, y hoy hay poco”

Juan Magraner. Entrevista 360 Grados Libros
“El micrófono tiene la capacidad de hacer grande lo que haces mal”

Charlamos con Juan Magraner (@juan_magraner), periodista y locutor del programa Hoy por hoy de Cadena SER en su desconexión valenciana, sobre periodismo radiofónico y la proximidad con el receptor que aportan las noticias cuando son transmitidas a través de las ondas.

¿Qué palabras o conceptos definen el buen periodismo?

Veracidad, contraste, trabajo, valentía y tiempo.

¿Qué han supuesto Internet, las redes sociales y la aparición de medios nativos digitales para la evolución del periodismo y de la profesión de periodista?

Al periodismo “tradicional” le han quitado tiempo para contrastar, para trabajar. Han reducido todo a una carrera por el titular y una vez publicado este titular la información queda vieja y a por otra cosa “nueva”. Eso no es malo, pero sí obliga a redefinir el modelo y desde luego no debería inhabilitar el “buen periodismo”, sin confundirlo con el periodismo tradicional. El buen periodismo vale dinero y requiere tiempo y de eso, de ambas cosas, hoy hay poco. Supongo que para que eso último cale en los medios tradicionales hace falta tiempo y que se asienten las nuevas estructuras digitales sobre las que pivota todo. Que cada cual encuentre su sitio. Quien quiera competir en 140 caracteres que lo haga y quien quiera hacer periodismo de otra manera que pueda hacerlo también. Para el periodista supone una oportunidad, desde luego, y un reto. El nuevo “campo de juego” no sigue las reglas tradicionales y hay nuevos jugadores (cualquiera con un perfil en una red social) que amenazan el control que sobre la opinión han tenido históricamente los medios tradicionales. Al periodista le toca lidiar ahora con eso.

¿Qué puntos clave tiene la radio que la diferencian a nivel periodístico y de calidad de los demás soportes comunicacionales?

La radio tiene un plus de proximidad que no tiene ningún otro medio. Sería un error de la radio olvidar eso. Poder dirigirte a alguien, hablarle al oído, otorga a la radio una ventaja indiscutible: es más humana, no es una pantalla fría. La hacen personas a las que escuchas. La radio debe, por tanto, aprovechar los nuevos soportes para dar más facilidades al oyente a acceder a sus contenidos. Quien busca una radio quiere radio, que le cuenten cosas. Eso no deberíamos olvidarlo. Si a eso podemos sumar otros atractivos, perfecto.

¿Qué se debe tener en cuenta para dar una información en directo clara y de calidad en radio?

Lo primero es entender lo que cuentas. Si quien cuenta algo no lo entiende, difícilmente lo entenderá quien escucha. En ese sentido la locución cobra para mí enorme importancia. Es precisamente lo que debe diferenciar a la radio. En definitiva, debe ponerse al mismo nivel lo que se cuenta y cómo se cuenta.

¿Alguna vez tuviste miedo al micrófono? En caso afirmativo, ¿cómo lo superaste? ¿Cómo te enfrentas o te preparas para un directo a nivel físico y mental?  

El día que no sienta mariposas en el estómago a la hora de ponerme delante de un micrófono me iré a mi casa. Naturalmente que he tenido y lo respeto. El micrófono tiene la capacidad de hacer grande lo que haces mal. ¿Cómo lo superé? Preparándome. Estudiando. Es una lástima que la locución no figure en los estudios de futuros periodistas (comunicadores nos llaman) que se van a dirigir a la gente a través de medios como la radio, la televisión, un audioblog, un tutorial, etc. Resulta que enseñan “gramática”, “redacción periodística”, pero no “prosodia”. Parece que como todos hablamos, con eso basta. Y es falso. No es una laguna, es un agujero negro en los programas formativos que en el mejor de los casos reducen lo que debería ser materia troncal a “cursillos”. Y en cuanto a la preparación física y mental… bueno, cada uno se enfrenta al directo de una manera. Yo procuro tomármelo con calma. La improvisación debe ser una herramienta más, pero no el arma principal en tu trabajo. Los temas deben prepararse, ser escritos para ser leídos. Hacerlo así te facilita luego el poder salirte del guion con tranquilidad y sin tener que desbrozar sobre la marcha.

Además de locutor eres doblador, ¿en qué sentido te beneficia tu experiencia y conocimientos en el mundo del doblaje en tu labor como periodista en radio?

Soy locutor. Como actor de doblaje me definiría casi que como un “novato”. Me gusta mucho, sí, pero no soy actor. El buen doblador es actor y locutor a la vez. Yo me tengo que conformar solo con ser locutor. En todo caso, el doblaje podría definirse como la forma más completa de locutor. Hay interpretación sin rostro, todo está en la voz. Trabajarlo y estudiarlo te permite intentar acercarte a matices de los que marcan la diferencia a la hora de “llegar” al oyente.

¿Cuál es el último libro escrito por un periodista que has leído, ya sea sobre periodismo o no, y que recomendarías?

Me encanta la novela negra y me encanta Lorenzo Silva. El último libro suyo que he leído es El lejano país de los estanques. El último libro escrito por un periodista y que habla, no de periodismo directamente, pero sí de la radio fue También la verdad se inventa, de Fernando Delgado.